12 junio 2006

¿Buenas fotos? pregunta a Ken Rockwell (PRIVACIDAD)


PRIVACIDAD
Soledad, buscando la creación individual, concentracion.
Aunque salgamos a fotografiar en grupo, debemos elegir la independencia para huir de las tomas mediocres.
Ver también: ¿Buenas fotos? pregunta a Ken Rockwell (PACIENCIA)
Ver también: ¿Buenas fotos? pregunta a Ken Rockwell (INTRODUCCION)

08 junio 2006

Joaquín Sabina, por Gorka Díaz


Columnazo de la semana, de Gorka Díaz en www.sincolumna.com
Es el trovador de las noches perdidas, los sueños rotos, las estaciones y aves de paso, las primaveras que se acababan antes de empezar, los abriles, mayos y junios que nos roba la melancolía y la luna llena que nos cuelga sobre los tejados y nos hace silbar el humo amargo de las despedidas a la hora en que maúllan las gatas del amanecer.
Sus canciones son el pan y la sal de los hogares donde si no falta el pan y la sal es gracias a la música de sus letras que hace bailar a esos sofás donde los matrimonios convencionales se engañan a sí mismos durmiendo la rutina del tiempo sin salir jamás de su pecera.
Es amigo de los vagamundos, de los locos con o sin colina, de los solteros y los divorciados, de los que se suicidan desde el viaducto o desde la ventana de su oficina, que viene a ser lo mismo, de los que sólo sueñan pesadillas por culpa del insomnio, de los que cantan tan mal que provocan aguaceros en París, de los que saben degustar el olor de las medias y de los que llevan vino tinto en la cantimplora cuando se van, en taxi, de excursión a esos montes con forma de pechos de mujer.
Tiene alas de ángel negro de Machín y un bombín para tener algo que colgar en las alcobas de las damas que le llevaban a su casa cuando era más joven y viajaba en sucios trenes en cuyos pasillos la medianoche le sacaba una lengua afilada de soledad.
Sus versos riman como esos besos que de vez en cuando nos da una camarera a la que engañamos con cualquier excusa con tal de no pagar.
Su voz ronca da fe de que ha vivido, que a fin de cuentas de vivir es de lo que se trata en esta vida, y nunca está de más pisar el acelerador por carreteras secundarias en dirección hacia uno de esos burdeles de luces rojas, verdes y amarillas en busca del consuelo que siempre ofrecen las caderas de las señoras putas.
Al menos en sus canciones, Sabina no es de los que cometen adulterio y luego se arrepienten, sino de los que se arrepentirían si no lo cometieran, aunque con el paso del tiempo ha ido renegando de algunas de sus frases como la de “me han traído hasta aquí tus caderas, no tu corazón”. Porque los años le han llevado a comprender que no hay relaciones de cama si no se cuela por lo menos una gota de amor entre tanto sudor.
Es además Sabina uno de esos tipos que no dudan en subirse, si hace falta, al Pirulí para ponerle los cuernos a los buenos modales y buscar en el horizonte a una de esas mujeres con las medias negras que torean con el bolso a las pasiones más bajas de la ciudad.
Los protagonistas de las canciones de Sabina son violadores de las convenciones de la sociedad que espían a las chicas tras los matorrales que pueblan los jardines y no dudan en desprenderse del abrigo gris de los días cotidianos para mostrar su tatuaje de pirata sin más bandera que su propia calavera.
Son también lectores de las noticias de sucesos y los obituarios, que casi siempre son la misma cosa, y a su vez gente que se cree protagonista de todas las rancheras mientras apura el penúltimo tequila bajo el sombrero de un árbol de estrellas y a cada trago llama una vez más a las puertas del infierno.
“Sabina no sólo es Dios, sino que además existe, y da sentido a la existencia de los derrotados de la vida a los que el paracaídas no se les abrirá por culpa de la nube negra”, cuenta Miguel.
Nuestro amigo llegó una vez a vomitar sobre el single de ’19 días y quinientas noches’ que un tal David Barreiro consiguió de la cadena Ser antes incluso de que se comercializara. No lo hizo porque no le gustara la canción, que de hecho todavía le emociona y recuerda a su más crudo pasado, sino porque le sentó muy mal una noche en la se emborrachó con rumbas de Bambino (“te odio tanto, que hasta yo mismo me espanto”) en los bares de Malasaña y terminó eclipsado por la oscuridad en plena sala Sol. Pero su amigo logró salvar aquel CD tras pegarle una buena ducha y se lo envió de regalo a una novia que probablemente nunca supo del pasado de aquel CD que tenía entre las manos.
Cuando recientemente pudo disfrutar en Benidorm de la reaparición en escena de Joaquín Sabina tras sus devaneos con la depresión de nubes negras, Miguel se sintió muy feliz al comprobar que el flaco de Úbeda está todavía mucho más vivo de lo que está y ha estado nunca. Y se puso a recordar la noche en la que con apenas once años escuchó por primera vez la voz de un cantautor que hablaba de que el mar es un vaso de ginebra, de que hay bragas que se olvidan en el armario y de que la muerte es algo así como una bella dama que vendrá a visitarnos a todos algún día. Que en el caso de Joaquín sea lo más tarde posible, que sus canciones son el bálsamo que necesitan los agujeros que tenemos en el alma y nos resultan imprescindibles para poder bailar mientras la lluvia moja con sus gotas las capotas de los coches.

Aprovecho para recomendaros, y no sólo a los adictos a Don Joaquín, un rincón: www.joaquinsabina.net

C.I.

Todo va bien. Eskerrik asko!

06 junio 2006

Reflex digital Sony

El supergigante de electrónica de consumo Sony quiere su parte del pastel, y no se suele conformar con porciones pequeñas. Lanza el mes que viene su modelo Alpha DSLR-A100. 10 megapixels, montura Minolta, estabilización en el cuerpo, protección contra el polvo, autofocus al mirar por el visor, 1000$...
Me va a gustar ver la reacción del mercado (clientes y competencia) ante la esperable operación de marketing (ingentes recursos publicitarios y una envidiable red comercial a escala planetaria).
Me he enterado en xataka
Detalles oficiales en Sony

01 junio 2006

trivial a medida


¿Buenas fotos? pregunta a Ken Rockwell (PACIENCIA)

La buena fotografía no depende de una agenda. Necesitas “luz” e “inspiración”. Hay que sacrificar vida social, obviar al grupo, separarse temporal y situacionalmente de quien te acompaña, para buscar...
El buen fotógrafo hace fotos regulares, o incluso malas, si las hace con prisa. Los mediocres necesitamos más soledad y más tiempo aún. No es que nos guste estar solos, es que nos gusta hacer buenas fotografías… y algún día lo lograremos.
Ken nos recuerda, es vital, que la buena foto es la que “dice algo” y que es totalmente ajeno a la cámara. ¿O las buenas novelas salen de buenas máquinas de escribir?
Me gusta muchísimo la comparación entre el golf y la fotografía. Las dos cosas gustan a los que las practican, pero unos pocos consiguen que se les pague por hacerlo. Y las razón es las misma. Por talento y esfuerzo han conseguido buenos y constantes resultados.
Ver también: ¿Buenas fotos? pregunta a Ken Rockwell (INTRODUCCION)


¿Buenas fotos? pregunta a Ken Rockwell (introducción)

Estoy leyendo, premeditadamente a sorbos, un artículo de Ken Rockwell que explica qué hay detrás, antes, de una buena fotografía. Recomiendo ir al original, imprimirlo y masticarlo con los ojos cerrados.

Según lo disfrute, lo sintetizaré, más que nada para no tener que buscar y traducir las ideas claves cada vez que lo necesite/quiera. Por supuesto, recomiendo acudir a la fuente, en un inglés nada complicado, texto bien construido, con la densidad justa y una calidad excelente.

práctico probador tipográfico


TYPETESTER; ojalá todas las herramientas fueran tan orientadas a su uso y fin.